lunes, 29 de abril de 2013

Jugar (y no jugársela) con el clima

Entre asignaturas y cursos varios, este año está siendo un intensivo de arquitectura y urbanismo bioclimáticos para mí, y este proyecto es una oportunidad más para sacarle todo el jugo al clima para el diseño de la propuesta.
Según la RAE, bioclimático es "Dicho de un edificio o de su disposición en el espacio: Que trata de aprovechar las condiciones medioambientales en beneficio de los usuarios". Para ello, lo primero que hay que hacer es desgranar las cualidades (y defectos) del clima del lugar donde se asienta el proyecto para aprovecharlas a la hora de acondicionar los espacios. El potencial de este estudio es que los espacios, las orientaciones, los huecos y el soleamiento y las corrientes de cada estancia ayuden a conseguir el "confort interior" sin necesidad de tecnologías activas adicionales, esto es, la calefacción o el aire acondicionado tal y como estamos acostumbrados a utilizar.

              

Pero esto no es nada nuevo, y la arquitectura popular es la que más a sabido jugar con el clima cuando no se había extendido todavía el estilo "universal y comodín" con el que se construye mucho últimamente. Por ejemplo, ¿recordáis las antiguas persianas de caña o esparto? ... mmm... cañas de nuevo...  Eran la mejor solución para poder abrir totalmente todas las ventanas de la casa para tener corriente en los calurosos veranos de la meseta, pero manteniendo toda la casa casi en penumbra aún sin perder la conexión visual con el exterior por las rendijas que quedaban. Otro ejemplo, los balcones acristalados muy utilizados en el norte, no son unos centímetros cuadrados para ganar en el salón como nos han hecho creer últimamente, sino invernaderos con los que captar la radiación del sol durante todo el día para que éste sea a su vez absorbido por los muros de la casa y podamos sentir ese calor no sólo inmediatamente, sino durante las horas mas frías en que poco a poco vayan soltándolo gracias a su inercia térmica
Hay muchísimo pensado, escrito y diseñado sobre arquitectura popular y bioclimatica, así que yo voy a presentar sólo algunas de las formas de analizar el clima para asentar los criterios preliminales que tendré que tener en cuenta para diseñar la escuela, basándome, sobre todo, en la asignatura y libro de F. Javier Neila Arquitectura bioclimática en un entorno sostenible
Para empezar, necesitamos algo tan sencillo como conocer las temperaturas y humedades que se dan a lo largo del año. Aquí está la información concreta de Haití:
Lo primero, es aclarar que la franja coloreada en verde es el rango definido como "confort" para la latitud de Haití (no tienen la misma sensación de frío los esquimales que los saharauis, mismamente, todos pensamos que las guiris alemanas están locas cuando van en tirantes por Madrid a 15ºC...). Y en cuanto a la humedad relativa, se estima que es adecuada entre el 20 y el 80%. Por lo que, a simple vista que vemos que es un clima fácil, sin mucha variación, con algo de calor, pero no muy extremo y cercano al confort casi todo el año.
Pero hay más. Los hermanos Olgyay diseñaron un tipo de gráfico en el que se puede empezar a analizar qué medidas necesitamos tomar para adaptar las condiciones climáticas al confort una vez introducimos los rangos de temperatura y humedad máximas y mínimas para cada mes:

Y más allá llega el diagrama de Givoni, también actualizado en el ASHRAE Handbook, y en el que aparecen mucho más detalladas las medidas pasivas que podemos tomar para conseguir el confort:

En el caso de Haití, lo que hemos aprendido es, principalmente, que no necesitamos proteger las ventanas con vidrios, para qué, lo que necesitamos es ventilar constantemente todas las estancias, y conseguir que todo el interior y el perímetro de los edificios estén en sombra para evitar sobrecalentamiento por el sol. Cuando toque definir las protecciones solares para conseguir esa sombra constante, tendremos que acudir a la carta solar, en la que podemos ver la inclinación de los rayos de sol hora a hora a lo largo del año. Repito, en Haití va a ser muy fácil, pero esos cálculos se complicarían si hablásemos de Madrid, donde necesitamos proteger del sol en verano, pero conseguir que entre en invierno para calentar las estancias.


Yo, como Neila, creo que, respecto al diseño bioclimático, se debe hablar de buenas prácticas y de buena arquitectura y no de arquitectura singular, y más en un contexto de derroche (o pobreza en el caso de Haití) energético y material que está acabando con los recursos naturales a un ritmo que puede que no se recuperen.

miércoles, 17 de abril de 2013

Aprovechando trabajo ya hecho

Una vez se mete un pie en un proyecto, de repente todo parece estar hablándote a ti directamente, y así es como me siento yo ahora. No voy a negar, que en el fondo esas cosas no aparecen solas, algo de mi parte pongo. En mi búsqueda para cruzar potenciales ecosistemas en Haití (el humedal y los cañaverales) con posibles tecnologías alternativas aplicables en la economía y construcción (la quincha mejorada), he llegado a este enlace de los arquitectos peruanos que fueron a colaborar en la reconstrucción tras el terremoto, y en él hablan de la idoneidad de la quincha mejorada para nuevas construcciones en Haití pero denotan falta de recursos madereros y de bambú para poder generalizarla.



El Humedal es el ecosistema que actúa como depuradora natural, rico en fauna y flora, y hogar de muchas especies migratorias. No es noticia que a lo largo de la historia se ha intentado entender y copiar la naturaleza, y los humedales no se escapan. A parte de ser un potencial foco para recuperar la biodiversidad, las plantas de rivera, vamos, los juntos de toda la vida, son el método para depuración de aguas residuales más extendido despuñes de las depuradoras convencionales. A esta técnica se le llama fitodepuración, y hay mucho escrito sobre ello. Uno de los libros que más me gusta a mí es Waterscapes de Hélène Izembart y Bertrand Le Boudec.

Estanque de Miragoane, cerca de Petit Goave
En una situación en la que la erosión arrastra sedimentos que destruyen los ya debilitados cauces fluviales y superficies de agua, el humedal no solo se presenta como una muy buena opción para el control de los cauces, y por tanto de las inundaciones, sino un herramienta muy poderosa para paliar la falta de sistemas de saneamiento y el filtrado de sustancias tóxicas a los acuíferos en Haití.
Y como todo esfuerzo, la recuperación de un ecosistema tan rico y fértil como éste (y más si se consigue diseñar con tino las especies que lo pueblen) además proporcionaría una mina de nuevos recursos aprovechables en la economía haitiana, desde un lugar para la piscicultura hasta materiales de construcción, como la caña común (Arundo Donax) o el bambú.

Bambú
Caña Común 
Y ahí entra la quincha mejorada. Ésta es una técnica que se ha desarrollado en Perú, para mejorar una técnica tradicional de construcción con entramados de cañas a la vulnerabilidad sísmica de la zona. Sobre una cimentación de hormigón, se instalan unos pilares de madera por todo el perímetro, entre los que se encajan los paneles de caña entramada manualmente. Este entramado hace de armadura interior de los muros, por lo que, al forrarlo con barro y una última capa de enfoscado, el sistema es similar a un muro de hormigón armado y se convierte en una estructura sismorresistente apta para pequeñas edificaciones.

Proceso de cimentación
Entramados de caña en la estructura de madera

Fase de embarrado

sábado, 13 de abril de 2013

Proyectos inspiradores: Moving Schools


Hoy me siento inspirada y quiero compartir una historia real, la prueba de que todo es posible y los resultados mejoran incluso las expectativas. Moving Schools es un concurso para la construcción de una escuela en la frontera entre Tailandia y Birmania llevado a cabo por Building Trust International, que contó con un concurso internacional de ideas y, lo más importante, con una fase de construcción con voluntario locales y de la organización y profesionales locales. Sé que son muchas las fotos, pero merece la pena ver cómo en unos días fue posible construir toda una escuela con una mezcla de recursos y tecnologías locales e importadas combinadas con puntos de vista innovadores por parte de los ganadores. Sin duda su proceso, técnicas, recursos y resultado serán muy buena inspiración para mi proyecto. ¡Enhorabuena!

La escuela terminada, por  Building Trust International

jueves, 11 de abril de 2013

Entendiendo el problema: El mapa de retos

Como he dejado entrever en el post anterior, no me conformo con asumir los condicionantes constructivos y técnicos del problema, sino que, he querido entender cuáles son los problemas subyacentes a la necesidad de esta escuela de formación profesión. Para ello, y tras no poca documentación sobre la situación física, medioambiental, social, cultural y económica del país y la región concreta de Petit Goáve, he puesto en práctica una de las técnicas de acercamiento a los problemas que aprendí en h2i institute: EL MAPA DE RETOS. Consiste en preguntar (hacia arriba) ¿Por qué? se quiere algo y a la inversa (hacia abajo) ¿Qué me lo impide? para detallar soluciones más concretas.
En próximos posts iré desgranando las conclusiones que he ido sacando en la investigación de documentos, pero este primer acercamiento me ha servido para llegar a la conclusión de que el gran problema en Haití está en los recursos naturales (que son a su vez los recursos económicos con los que cuenta un país poco industrializado), que han ido deteriorándose tanto por los acontecimientos climáticos como por la sobre-explotación  Pese a la primera impresión que dan las fotos, se ha llegado a un punto en el que apenas queda el 5% de la cobertura vegetal y boscosa que un día tuvo el país, situación especialmente preocupante dado el relieve montañoso en todo el interior de la isla, y el suelo agrícola pierde capacidad regeneradora por momentos. En estas condiciones, la erosión y el arrastre de las capas superiores del terreno y los residuos de canteras y núcleos urbanos por laderas, ríos y tejidos urbanos son inevitables, llegando a afectar al litoral costero al que llegan a parar y cuya superficie ha subido hasta 20m. Los pescadores son los que más conocen las consecuencias de estos hechos.
Creo que podemos coincidir en que la "naturaleza" ya no existe como tal en Haití, por tanto, si el paisaje es artificial, mejor será que sea un paisaje construido con objetivos productivos a futuro que destructivos como sucede ahora. Así que, mi nuevo reto para el proyecto será encontrar y diseñar nuevos ecosistemas productivos que ayuden a frenar el proceso de degradación del entorno natural y a regenerar un nuevo sistema productivo y económico. Su regeneración, explotación y mantenimiento será lo que se investigue y enseñe en la escuela de formación profesional. No tiene sentido enseñar carpintería en un lugar sin madera...


¡¡¡ Arrancando motores !!!

El proyecto Formando Haití apenas tiene un mes de vida, y su nombre aún menos. Nace de un proyecto que Arquitectos sin fronteras planteó al Máster en cooperación para el desarrollo de la UPM, y que en nuestro grupo de trabajo de PFC hemos apadrinado como enunciado. Al no desarrollarlo directamente para ASF, no contamos con las prisas y enfoque meramente técnico que requeriría, pero sí con el acercamiento, documentación e ilusión de quienes aún trabajan para reconstruir este país azotado por tantos desastres.
El proyecto consiste en la construcción de una escuela de formación profesional en la localidad de Petit-Goave, a 60 Km de la capital, Puerto Príncipe, y epicentro del terremoto de 2010. En concreto, se instalará en una parcela de la asociación local MOSTHA (Movimiento sociocultural para los trabajadores haitianos) donde ya está en funcionamiento un pequeño dentro de asistencia sanitaria y de tratamiento de afectados por cólera, así como una pequeña instalación para alojar a los trabajadores. Junto con la escuela, se plantearán unas viviendas temporales, bien para los alumnos y/o los profesores. Especial atención merecerá la solución constructiva, que deberá buscar la sostenibilidad medioambiental y estructural, ya que se trata de una zona con peligros sísmicos y de tormentas tropicales y huracanes.

Empiezo compartiendo algunas fotos de la localización y parcela para el proyecto:





Desde el principio he tenido muy claro que mi visión se alejará a toda costa de la pena y del desastre pasados y quiero centrar mi propuesta en el potencial del lugar, de una población ilusionada y un mundo de posibilidades que da esta situación de "reconstrucción" de un país a todos los niveles. Seguro que mi gran problema será decidir qué dejo por el camino para contener la ambición de mi propuesta.
Por fin arranco motores, y pienso utilizar esta plataforma para ir compartiendo el material que vaya encontrando de Haití, de cooperación y de proyectos innovadores en procesos de participación y soluciones constructivas y técnicas. Pero sobre todo, para compartir mis puntos de vista y propuestas con la ilusión de abrir un nuevo rincón de conversación y aventuras que se escapa a lo que acostumbramos a discutir, incluso dentro del gremio. Sed todos bienvenidos a esta historia que acaba de empezar =)


Y aquí está el esquema de la parcela asignada y algunas fotos de su estado actual: