martes, 14 de enero de 2014

El gusano que soporta huracanes y terremotos

En mi camino en busca de la estructura que defina el proyecto, me topé con una contradicción. Desde el principio el espacio que yo pretendo en la escuela es un refugio, una cubrición capaz de aclimatar el espacio con la mínima intervención posible. Pero este "gusano aclimatador" de cañas entretejidas de tan ligero que es, plantea serios problemas de diseño y resistencia. Además está el problema de la conexión con el exterior, de hacer el espacio interior expansible e indeterminado, o de ser capaz de soportar plataformas elevadas en los tramos inundables, a lo que el gusano, claramente, se opone.

Espacio interior de la Cicada por Marco Casagrande

Entonces me dispuse a profundizar un poco más en la teoría sobre la construcción en bambú, que resulta menos invasivo que la caña y más resistente, aunque con formas y entramados muy distintos a los conseguidos con la caña flexible. Esto me abría los ojos a una alternativa que no me estaba planteando: ¿sería más apropiada una estructura de pórticos, con cubierta plana, que las superficies curvas y complejas tanto en diseño como en dibujo y capacitación en las que me había estado fijando? Respecto a este material, Simón Vélez es uno de los arquitectos más influyentes en la actualidad, pero sus ejemplos irradian una simetría y espacio interior que dista del "espacio gusano tamizado" que ando buscando.

Pabellón de bambú junto a un lago, por Simón Vélez

Gracias a los Reyes Magos, que me premiaron con el libro Building with Bamboo: Design an technology of a sustainable architecture, descubrí otro ejemplo precioso de estructuras con bambú parcialmente auto-construidas. Se trata del Colegio de las aguas de Montebello en Cali (Colombia) construido, como explica el arquitecto Andrés Bäpler, para dignificar este material, generalizarlo en el país y capacitar a los jóvenes en su trabajo para mejorar la situación de las familias, ¿os suena? En este caso, el abanico de estructuras utilizadas son más sencillas y a la vez flexibles que las que había visto, y en concreto una de las piezas me resultó tremendamente sugerente.

Colegio de las aguas de Montebello en Cali, por Andrés Bäpler

La dificultad, y a la vez la clave de la estructura de mi escuela, está en la gran luz que manejo (15m) que obligan a reforzar la viga de cubierta. Pero si este refuerzo es cóncavo como en el ejemplo, me permite conseguir una cubierta multicapa que solucione por un lado la resistencia y estabilidad y la evacuación de aguas con una cubierta plana, y una segunda cubierta interior que recoge y tamiza el espacio cubriendo las vigas de refuerzo.

Esquema de mi módulo estructural y espacial

Y con ligeras variaciones, este sistema podría adaptarse a las peculiaridades de las distintas bandas de paisaje, así como a los requerimientos espaciales y funcionales de cada tramo escalándose proporcionalmente en cada tramo.

Requerimientos y adaptación a las bandas de paisaje

Variaciones sobre la maqueta de estructura
Qué bonito y fácil fue avanzar en sección ideal, hasta que me topé con la planta, y los problemas que derivan de la coexistencia de distintas alturas, distintos planos y pliegues del propio terreno, curvatura del gusano... Por ahora, mientras intento sistematizar todas estas variaciones y autocad me vuelve loca y convierte en horrores lo que en los croquis hasta queda bonito, me quedo con la maqueta 1/500, con su cubierta continua y ondulante, espacios fluidos sugeridos e integración en el paisaje, de momento mucho más inspiradora que los dibujos y la única que consigue darme alas en esta pelea constante.

Maqueta con la sucesión de pórticos

Seguiremos trabajando en ello. Hasta la próxima.