jueves, 19 de diciembre de 2013

Dos pasos de hormiga y cuatro de cangrejo...

Ha pasado mucho desde mi última entrada. Después de tomarme casi un "mes sabático" haciendo otras cosas como visitar París, volver a enfrentarme con el proyecto no fue tan fácil como parecía. No voy a mentir, un día pienso que ya está todo hecho y al siguiente me tiro de los pelos y parece que no tengo nada.

Lo primero era, y sigue siendo, pasar esos esquemas tan fáciles y bonitos donde la arquitectura apenas era líneas a puntos y rectángulos, a unos planos definidos, y en éstas seguimos. Para dar grosor y sección a ese recorrido a través de las bandas de paisaje me hice una maqueta simplificada (y algo abstracta, ejem) de la parcela, para empezar a tantear los espacios que quería acondicionar. Encontrar materiales que me sirvieran e inspiraran para la maqueta ya fue de por sí una odisea, y al final alambre y maya de aluminio parecen ser lo más fácil y estable de moldear. Con esta aproximación pretendía hacer variaciones sobre la sección, los espacios, la forma de la cubierta... Y poder ver el impacto de las propuestas en términos de soleamiento y, en fin, confort de los espacios.

Tanteo de la relación entre tramos de recorrido
Relación entre espacios, recorrido y cubierta
No es una nave espacial, es otro tanteo teniendo en cuenta los volúmenes vegetales creados

No es que sea mi mejor maqueta, pero dio pie a empezar a dar materialidad a líneas y rectángulos, y gracias a ella me vi con fuerzas de pasar esas ideas a la maqueta real e intentar sacar una planta y secciones de cómo podría ser.

Maqueta de idea del edificio
Croquis adaptando los aprendizajes de la maqueta
Pero tanto criterio bioclimático, inclinaciones solares, orientaciones y áreas inundables dando vueltas en mi cabeza no me dejaban decidir y avanzar en una escala más cercana. Como suele pasar, necesité dar un paso atrás y sintetizar todos estos criterios para poder diseñar con unas reglas mínimas. Como ya dije en la entrada anterior, la escuela está pensada como el mínimo acondicionamiento necesario dentro de los paisajes creados para poder realizar las actividades del programa con seguridad y bienestar. Y ese bienestar en Haití y para el programa de mi escuela es:

Programa y necesidades para el bienestar

Así que necesitaba "medir" las condiciones del entorno a lo largo del recorrido [humedad (inundación y lluvia), soleamiento (calor y luz natural) y viento (ventilación y brisa)] y compararlas con esas condiciones de bienestar necesario para determinar los elementos arquitectónicos necesarios y su forma en función de los distintos elementos. Con esto, los elementos de suelo y cubierta ganaban materialidad:

Mapas de condiciones y necesidades de acondicionamiento

De nuevo parecía que esto me sacaría del agujero, pero la construcción se puso en mi camino, y pensar en materiales como las cañas y el bambú que construyen superficies curvas y volúmenes "fluidos" tan ajenos a lo que una está acostumbrado no es fácil. Con todo, después de demasiados croquis de plantas, secciones y hasta perspectivas, y alucinada por las fotos del Lombok International Bamboo Architecture Festival, lo que conseguí sacar para la corrección de esta semana fue esto:

Sección por el acceso "sobre tierra firme"
Sección por el taller elevado
Planta a nivel del recorrido de la escuela

Supongo que alguien ajeno al día a día del proyecto le surge rápido la pregunta "¿Qué ha pasado con los esquemas? ¿ De dónde ha salido esta idea de globos unidos por una línea?" Yo necesité que mi tutora me abriera los ojos ante el "enrevesamiento" de estas plantas y secciones, que ya poco tienen que ver con un recorrido "línea de puntos" habitable bajo un refugio mínimo, y ante estas estructuras formales e imposibles que estaban surgiendo... Así que paso atrás y nos pusimos a buscar las bondades de los esquemas que se habían perdido. Y ahí estamos ahora, con una nueva maqueta que no parte del recorrido sino de la cubierta refugio, con el Museo de Arte de Teshima como referencia, a ver si recuperamos la sencillez mientras ganamos espacios más ricos.

Museo de Arte de Teshima, de Ruye Nishizawa

Pero todo esto ya llegará en la próxima entrega =) .Como siempre, comentarios e ideas son bienvenidos y, por si no nos vemos antes, ¡ FELIZ NAVIDAD a todos!